Cuando el aire se vuelve muy seco —por el clima o por calefacción intensa—, la madera puede resentirse.

En YŪGEN sabemos que la prevención es la mejor aliada para que tus muebles naturales sigan impecables, año tras año.

 

¿Qué le pasa a la madera en lugares con clima seco?

Cuando el ambiente pierde humedad, la madera también pierde agua.
Esto puede hacer que el mueble se contraiga ligeramente, provocando pequeñas grietas o desplazamientos en las juntas.

No hay que alarmarse: la madera se adapta. Pero con algunos cuidados, podés prevenir estos movimientos y mantener su belleza por mucho más tiempo.

 

Tips para proteger tus muebles de madera en ambientes secos

🌾 Humidificá el ambiente:
Un humidificador ayuda a equilibrar el aire en casas con calefacción o climas áridos, manteniendo niveles de humedad saludables (ideal entre 40% y 60%).

🌾 Evitá fuentes de calor directo:
No coloques muebles de madera justo frente a radiadores, estufas, salamandras o calefactores. El calor seco directo acelera el resecamiento.

🌾 Hidratá la madera naturalmente:
Cada tanto, pasá un paño apenas húmedo sobre el mueble. Y una o dos veces al año, aplicá aceites o ceras naturales para nutrir la superficie y mantener su flexibilidad.

🌾 Cuidalo de cambios extremos:
Evitá cambios de temperatura bruscos (por ejemplo, abrir una ventana por la que entre aire helado del exterior cerca de un mueble cuando el interior está calefaccionado).

🌾 Limpieza con cuidado:
Para limpieza diaria, siempre usá paños suaves y sin productos químicos agresivos.

 

Un mueble de madera es un compañero de vida.
En YŪGEN trabajamos con materiales nobles como el kiri y la lenga patagónica, que te invitan a disfrutar la belleza real de la naturaleza en tu casa, respetando sus tiempos y necesidades.